Empezamos…

Sandra dijo que se mudaba a otra ciudad… y yo descubrí el scrapbooking.

Con ganas, mucho cariño, tiempo, escasas herramientas y casi ningún conocimiento me lancé a crear un álbum de fotos que le recordara, siempre que lo necesitara, lo mucho que la queríamos. Ahora nos separan unos 600km y nos unen muchas sesiones compartiendo copas de vino y charlas eternas, viajes y aventuras, salidas petardas, salidas glamurosas y un montón de fotos.

Este es el modo en el que hace aproximadamente 6 meses supe de la existencia del scrapbooking y se inició una etapa de descubrimiento y emoción que hoy pongo aquí para compartir con vosotros (estéis donde estéis).